En Plena Crisis Existencial

En Plena Crisis Existencial

Tabla de contenidos

Te haces o te has hecho estas preguntas: ¿Qué estoy haciendo con mi vida?; ¿Así será el resto de mi vida?; ¿Cuál es el sentido de mi vida?

¿Has pensado varias veces en dejar tu trabajo, vender lo poco que tienes, marcharte a la otra punta del mundo y mandarlo todo a la mierda? Pues que sepas que no eres el único que se siente insatisfecho con su vida, estancado e inseguro y sin ver la puerta de salida.

A esto que muchos hemos vivido, los expertos lo llaman crisis existencial que, dependiendo de tu evolución de vida, te puede ocurrir a los treinta, a los cuarenta a los cincuenta e incluso más mayor cuando echas la vista atrás y haces retrospectiva de tu insulsa y rutinaria vida. 

Puedes encontrar muchas definiciones de ‘crisis existencial’ pero lo que está claro es que la mayoría de ellas nos dice que es “una crisis que implica ansiedad sobre la dirección y la calidad de la vida y que se experimenta más comúnmente en un período que va desde los veintitantos años hasta los cuarenta y tantos”.

Pero lo que hay que saber es que cada uno la vive de una manera muy personal e individual y depende del momento vital pero una una cosa está clara: Si crees que está atravesando una crisis, probablemente, por no decir absolutamente, estás en ella.

Si bien la idea de una crisis puede parecer aterradora, si reconoces lo que está sucediendo ahora y abordas cómo te sientes, no solo te sentirás más feliz y con más confianza en ti mismo y en tus decisiones, sino que evitarás repetirla años después. Pero como no la traspases y te la pongas de frente, la muy jodida reaparecerá las veces que haga falta hasta que tengas la valentía de vivirla.

Ya sabéis que para mi toda crisis o caos es una puerta de renacimiento hacia tu coherencia y tu libertad. Es tu oportunidad de reflexionar sobre las decisiones que has tomado en tu vida y examinar si esas mismas decisiones se alinean con la persona que eres hoy. Y normalmente no coinciden y de ahí la crisis y todas sus consecuencias vitales que la acompañan.

Nuestra sociedad nos aprieta desde bien jóvenes para que sepamos lo que queremos hacer con el resto de nuestra vida antes de que tengamos la oportunidad de conocernos a nosotros mismos lo suficiente como para saber lo que realmente queremos hacer.
Pero, además, es que la Elección (en mayúsculas) hace que nuestra vida tome una dirección u otra y es curioso porque en esos momentos nadie se plantea que pueden haber varias direcciones en la vida.
En mi caso yo tomé una, estudiar imagen y sonido, pero de ahí me pasé a otra y luego a otra y viéndolo desde otro lugar me doy cuenta de que he ido y sigo yendo a otra y a otra y con cincuenta años voy hacia a otra pero si haces esto, nuestros familiares y allegados te van a ver como un irresponsable, una cabra loca y te dirán que no tendrás un futuro venidero ni una buena jubilación (con la jubilación nos daría para otro episodio). Pero es a través del proceso de tomar nuestras propias decisiones, trabajar en varios trabajos, entablar diferentes relaciones, mudarnos y viajar lo que realmente hace que descubras quiénes somos como seres humanos. Y es un total descubrimiento en continúo movimiento porque no eres la misma persona de tus veinte años ni serás la misma de tus sesenta. 

Ciclos de Vida según la Medicina China

Para la Medicina China el hombre vive etapas de ocho años y las mujeres de siete.

Estas etapas fueron definidas hace miles de años en el texto médico clásico chino ‘El Clásico de Medicina Interna del Emperador Amarillo’ en el siglo III a.C. y es una de las obras más antiguas en la historia de la Medicina China. En este texto se hace una distinción entre los ciclos para hombres y mujeres. La forma en que se mantiene la salud a través de cada fase se debe en gran medida a lo que se llama Jing que es la esencia de una persona, es similar a la fuerza de los genes que heredamos de nuestros padres. Entonces, el Jing nos lo dan nuestros padres en el momento de la concepción.

Ciclos de la Mujer (7 años)

  • 7 años: El sistema reproductivo de una mujer comienza a desarrollarse.
  • 14 años: Aparece la menstruación y puede tener un hijo. 
  • 21 años: La energía de una mujer, especialmente la fertilidad, está completamente desarrollada. La energía de Riñón de la mujer se vuelve similar a la de una adulta media, por eso empiezan a salir las muelas del juicio ya con el resto de la dentición al completo.
  • 28 años: La fertilidad de una mujer alcanza su punto máximo y se considera la mejor edad para tener hijos en la visión oriental. El Jing está en su máximo esplendor y cuando es más adecuado que se quede embarazada. También en este ciclo sus tendones y huesos se vuelven duros y el pelo es más largo que nunca.
  • 35 años: El cuerpo y la fertilidad en general comienzan a disminuir. Sin embargo, las mujeres todavía pueden tener hijos. Ciertos meridianos empiezan a debilitarse, su tez empieza a parecer marchita y sus cabellos empiezan a caer.
  • 42 años: La energía física y la fertilidad disminuyen y concebir se vuelve más difícil. Hay más meridianos que empiezan a debilitarse, su tez aún parece más marchita y el cabello empieza a volverse gris.
  • 49 años: Es cuando muchas mujeres comienzan a experimentar la menopausia y ya no pueden tener hijos. La energía de los meridianos que tienen más relevancia para la concepción se vuelven deficientes, la energía sexual se agota y la menstruación desaparece, el cuerpo se vuelve viejo y ya no puede quedarse embarazada.

Ciclos del Hombre (8 años)

  • 8 años: El sistema reproductivo de un hombre comienza a desarrollarse. El cabello y los dientes son fuertes. 
  • 16 años: Los sistemas reproductivos de los hombres están completamente desarrollados y pueden reproducirse. El desarrollo en todos los sistemas continúa, y el cuerpo, los músculos y los dientes se fortalecen. La energía de Riñón aún es más abundante, la energía sexual empieza a llegar, está lleno de semen y puede eyacular, ya puede concebir hijos cuando tiene relaciones sexuales con una mujer.
  • 24 años: La energía renal se desarrolla, las extremidades son fuertes. Es este ciclo es cuando la energía de Riñón se vuelve igual a la de un adulto medio, con sus tendones y huesos fuertes, empiezan a salir las muelas del juicio, teniendo el resto de la dentición completa.
  • 32 años: El cuerpo está en su apogeo físicamente, y todos los sistemas son robustos y vitales. Es en esta edad cuando todos los tendones, huesos y músculos se han desarrollado plenamente.
  • 40 años: El cuerpo comienza un declive gradual. La energía Yang (o fuego) disminuye, el cabello se vuelve gris y los dientes se vuelven más débiles.
  • 48 años: El declive físico continúa. Aparecen arrugas, el cabello se vuelve gris y hay menos energía en general. Se debilita más la energía de Riñón y empieza a producirse agotamiento, su piel empieza a parecer marchita .
  • 56 años: Debido a una disminución en las energías renales y hepáticas, el cuerpo comienza a perder flexibilidad, el movimiento puede volverse difícil y la rigidez y el dolor pueden comenzar a establecerse. Empieza a debilitarse la energía del Hígado, los tendones se vuelven inactivos, la energía sexual empieza a agotarse, el semen se vuelve escaso. Riñón se debilita y todas las partes del cuerpo empiezan a envejecer.
  • 64 años: La energía vital de los hombres se debilita, los huesos se vuelven más frágiles, la flexibilidad disminuye y los dientes comienzan a deteriorarse. Los dientes y el cabello se han caído, su energía sexual se agota, ya no puede concebir hijos, sus tendones y huesos son flojos, el pelo de la cabeza se vuelve gris en las sienes, su cuerpo es pesado y sus pasos se vuelven indecisos.

Por supuesto, algunas cosas han cambiado desde el siglo III. Uno de los más notables es que simplemente vivimos más tiempo. Nuestra vida útil prolongada se debe a una variedad de factores, incluido el acceso a alimentos y agua limpios y una mejora drástica en nuestra calidad de vida en general. 

Estos ciclos son formas de crear conciencia sobre la forma en que los hombres y las mujeres se mueven a través de las diferentes etapas de la vida.

Para las mujeres, el conocimiento de estas etapas puede ayudarlas a navegar eventos significativos, como si y cuándo tener hijos y cómo pasar por la menopausia sin ansiedad ni síntomas físicos. Los aspectos emocionales y espirituales también necesitan ser cuidados, tal como lo hacen nuestros cuerpos. 

Para los hombres también, estas etapas actúan como una especie de guía, permitiéndonos saber qué esperar y ayudándonos a movernos a través de cada uno de los ciclos sin problemas. A veces, estas transiciones no son fáciles, por lo que tener una guía puede ayudarnos a lidiar con las ansiedades, los factores estresantes y las preguntas que surgen a medida que entramos y salimos de cada fase. La medicina china nos ofrece muchas herramientas para ayudarnos a movernos más fácilmente por la vida.

Qué hacer en plena Crisis Existencial

Sigamos por dónde íbamos porque una vez que ya tienes una idea de quién eres, de lo que valoras y cómo quieres vivir tu vida es cuando entonces puedes comenzar a tomar decisiones sobre lo que quieres hacer siendo coherente contigo mismo. Desafortunadamente, nuestra sociedad está al revés, razón por la cual muchos nos hemos sentido perdidos e inseguros de cómo crear la vida que queremos vivir.

Así que una vez te das cuenta de que está atravesando una crisis, te vienen las ganas de arreglar este problema cuanto antes, este problema que te está carcomiendo y se te ocurre que lo mejor es cortar de raíz: dejar tu trabajo, dejar a tu pareja, mudarte a otra ciudad… Pero justamente no es un buen momento para hacer cambios tan drásticos porque por hacerlos no vas a solucionar la crisis, ojalá fuera tan fácil ya que si lo haces te vas a sentir más perdido y solo. Lo que si es momento es para reducir tu ritmo de vida y ‘parar’ dejando de lado esas actividades que te consumen para tener espacio y poder reflexionar y comprender mejor cómo llegaste a donde estás hoy.

  • Reconócete en tiempo real, en este momento: Para comprenderte mejor a ti mismo y saber por qué te sientes infeliz, debes aprender a ser más consciente, más presente. Esto que dice tanto Eckhart Tolle: Aquí y Ahora. Libro muy interesante, por cierto, el suyo que a mi me ayudó muchísimo a mis treinta años: ‘El Poder del Ahora’.  Simplemente tómate un momento (puedes empezar con cinco minutos tirado en el suelo o una esterilla) para detenerte y tomar conciencia de tus pensamientos, sentimientos, sensaciones corporales y tu entorno en tiempo real. Es a través del proceso de aprender a identificar tus pensamientos y sentimientos en el momento que puedes comenzar a comprender mejor tus motivaciones, tus patrones de pensamiento y lo que impulsa tu comportamiento.
  • Si consigues convertir esto en una rutina diaria podrás avanzar. Pregúntate: ‘¿Cómo me siento?’ Y así empezarán a aparecer esos patrones que llevas durante años, que no eras consciente y de que no te hacían ningún bien. Una vez identificados pierden el poder y puedes comenzar a disolverlos. ¿Cómo? Pues tan simple como empezar a no creer en ellos.
  • Regresa un momento al pasado: Tus pensamientos y creencias sobre ti mismo y el mundo que te rodea provienen de tu pasado. Piensa en lo que te dijeron tus padres, familiares y allegados cuando eras niño. Reflexiona sobre lo que viste y viviste cuando eras niño y cómo eso afecta cómo te ves a ti mismo en este momento. Esta es tu oportunidad de mirar tu vida con expectativas realistas y definir cómo vas a ser en ella independientemente de todo lo que has aprendido porque ya no se sostiene y aquí es cuestión de reaprender y empezar a crear nuevas maneras de ver la vida sin miedo a creer que son imposibles.
  • Comprensión desde el Ahora: Ahora que comprendes mejor de dónde provienen los pensamientos y creencias, comienza a pensar, basándote en tus propias experiencias como adulto, qué valoras y cómo quieres vivir tu vida. Identificar lo que significa tener éxito, lo que significa para ti vivir una vida feliz y saludable. Está bien ser consciente que lo que pensabas que te haría feliz hace unos años no te haga feliz ahora.
  • Deja de juzgarte y juzgar a los demás y sé amable contigo mismo: A lo largo de todo este proceso, es fundamental que dejes de lado cualquier juicio que tengas sobre ti mismo o sobre las personas que te rodean. Esto es muy común y nos sale de manera automática. Regresar a tu pasado no significa que ahora la culpa de todo sea de tus padres ni tampoco es cuestión de culparte o criticarte por las decisiones que has tomado. Aquí es momento de hacerse cargo uno mismo de su propia vida y ser consciente de que pocos son los que saben exactamente qué quieren hacer con el resto de sus vidas. El proceso de aprender sobre ti mismo es un trabajo para toda la vida y nadie sabe exactamente lo que está haciendo, así que acepta tu camino y sé amable contigo mismo pero sin dormirte en los laureles porque que nosotros sepamos sólo tenemos una vida.

¿Cuánto tiempo dura esta Crisis Existencial?

No hay una respuesta concreta a esta pregunta, ¡por eso es tan frustrante! Es importante recordar que superar una crisis existencial es un proceso. Cuando no estás contento con tu vida y no estás seguro de qué te hará feliz, te sientes incómodo. Esa incomodidad te hará pensar que necesitas “resolverlo todo lo antes posible”, pero no tomes ninguna decisión sólo para sentirte mejor en ese momento.

En lugar de centrarte en ¿cuándo terminará esto? céntrate en tu crecimiento del día a día, en todo lo que vas avanzando por pequeño que sea. Lo importante es no quedarse en el sofá viendo Netflix. Cada semana o dos haz un repaso para reflexionar de lo que has aprendido has aprendido sobre ti mismo, de lo que te gusta y lo que no te gusta, de tus avances y los cambios que has realizado y de cómo te sientes cada día.
Esto te ayudará a mantenerte concentrado en tu propósito, que es sentirse mejor y sentir que avanzas en la dirección correcta con Coherencia, es decir, piensas, dices y haces lo mismo. Antes de que te des cuenta, mirarás hacia atrás y verás que toda tu vida ya ha cambiado.

Yo Isasi

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *